'Receta contra tribulaciones', 'Si…', 'A la alegría' y una saeta silenciosa

Por Juan Pablo Mañueco

(escritor y periodista)

 

 

1. Unas palabras escritas para reconfortar el ánimo en estos tiempos de tribulación...

 

RECETA PARA DÍAS DE TRIBULACIÓN, DEVENIR, CAMBIO Y MUDANZA

FE en que las espinas de los caminos de la Tierra que surjan a nuestro paso llegaran al final de su noche.
ESPERANZA en que la lluvia dejará de llorar su insaciable llanto.
CARIDAD para hacer ese camino en compañía de cuantos sedientos entonen tal canto.
sellando en sonidos comunes el silencio que ahogarán nuestras voces.

PRUDENCIA para discernir el comportamiento correcto y lo que entraña dolor y quebranto.
JUSTICIA que vuela hacia donde se derrama lo que consideramos que es verdad, cada cual merece y damos a cada mujer y cada hombre.
FORTALEZA que existe para soportar, resistir, adaptarse y doblarse ante las adversidades sin que ello rompa nuestros cuerpos, almas ni corazones.
TEMPLANZA para usar todas las cosas planetarias y beberlas y amarlas en copas moderadas, pues este es el modo más sacro y más santo.

Todas estas virtudes te deseo para los tiempos de tribulación y no hacer mudanza
de ellas cuando las raíces de tu corazón parezca que flaquean un poco, un mucho, un cuanto,
pues con ellas alcanzarás finalmente los verdes edenes de multitudes de tiempos y lugares de encanto,
con las llaves de paz que encierran las palabras Fe, Esperanza, Caridad, Prudencia, Justicia, Fortaleza y Templanza.

El cielo de serenidad donde reina el tibio sol del bienestar, de la satisfacción y de la felicidad con ellas se aproxima, atraviesa tu alrededor hacia ti y cristalinamente avanza.

 

 

 

* * * 

 

  1. Mi pequeña contribución ante la declaración del Estado de Alarma en España, y que se llama “Si…” totalmente a propósito y salga el sol por donde quiera.

 

SI... 

 

Si tú quieres saber mi palabra castellana preferida, te diré que es vida.

Si vous voulez saber la palabra francesa que prefiero, yo te diré que es vie

Si du me necesitas para que elija qué palabra sueca escojo, te diré que liv

Si tu me convocases a exponer la palabra latina que más aprecio, te diría vita.

 

Si sie deseas saber la palabra alemana que antepongo a todas, pronunciaré leben.

Si você me pregunta la palabra portuguesa que más estimo, diré que es a vida.

Si tú me interpelaras sobre mi palabra italiana elegida, yo también afirmaría vita.

Si u me propusieras dilucidar la palabra neerlandesa que más brilla, pensaría en el esplendor del fonema leifen.

 

Si ant me dijeses cuál es mi palabra árabe más amada, te diría al-hayya.

Si you me interrogaras acerca de mi palabra inglesa predilecta, respondería life.

Si tú me consultases en torno a mi palabra hebrea selecta, escogería la de hais.

Si app mostrases anhelo por conocer qué palabra hindi tomara, pronunciaría jeevan.

 

Si tú quisieras atestiguara la palabra suajili que entre su ramillete tomo, lo haría con maisha

Si uponi demandaras por la palabra bengalí que amo más en mí, respondería jiban.

En japonés yin tsé, en ruso shishu, en tailandés chiwit, en turco hayat…

 

Pero si me preguntas cómo se conjuga cada una de esas palabras

en una vida que conduzca a la calma,

a la quietud y a la ataraxia,

yo te diría que con prudencia y amor a la justicia, fortaleza y templanza.

 

Con fe en tu fuerzas y en ti mismo confianza,

pero sabiendo sólo que eres tan sólo una sencilla criatura humana,

y que el cielo parecerá que cae sobre ti más de una tarde, noche o mañana…

 

Más si consigues hacer que tu cuerpo y tu alma

desde lo más profundo del barro derramado logres que de nuevo se rehaga,

que el recuerdo y el anhelo de recuperar aquellas jornadas

en que el esplendor de la hierba de nuestros días en nuestros corazones brillaba.

 

Si consigues que el triunfo te recuerde que habrá días que fracasan,

pero al mismo tiempo logras que tus nervios se templen y se alce tu cara,

para ver de nuevo cómo la esperanza

 

desde la fuente interna de tu ser nuevamente mana,

y prosigues sin terquedad pero lleno de constancia.

Si tras el esfuerzo de conseguirlo alcanzas

la meta que te propusiste sin que las dificultades intermedias te hagan

 

hundirte y bajar las mirada.

Si tu bandera ondea incluso estando herida pero aspira a volver a estar alta,

si sobre el aire tembloroso se eleva la fuerza de tu voluntad soberana,

 

si descorres el cerrojo de la contrariedad hasta que la puerta se abra,

si la sangre parece incluso que deja de andar por entre tus venas templadas,

si por tus labios entreabiertos diese la impresión de que algo suavemente etéreo te falta,

 

pero pronuncias en tu interior vida, vie, liv, vita, leben, leifen, al-hayya,

life, hais, jeevan, jiban, hayat…

sabrás cómo sobrellevar los pasos por el tiempo de tu trabajosa jornada.

 

Y más aun, estarás sobreviviéndote incluso a estados de tu aparente muerte

y estarás amando a la herencia más espléndida que de la naturaleza recibiste,

y estarás sumando fortaleza, ánimo y vigor a tu propia vitalidad y suerte

y estarás uniendo tu voz a este poema que se escribe para decirte. “Así, pues, vive

 

 

* * *

 

 

3. Poema para recordar en tiempos como estos de tribulación por los que atravesamos (18-3-2020)

 

 

PEQUEÑO CANTO A LA ALEGRÍA PARA MOMENTOS DIFÍCILES 

 

Puede acaso y tal vez tan solo el triste

Urdir mil causas arduas de tristeza

En que estarse, y seguir tal aspereza.

(De nada ha de servir cuanto sufriste)

 

En cambio la alegría da entereza

Al que la ha y la busca, y en ella insiste,

Con ansia y ganas y aún más la viste

A su talla y medida, pieza a pieza.

 

Sólo la piedra que en su inmóvil pecho

Otra acción no ha que estar quieta en su lecho,

 

Yace en su estar perpetuo inamovible

Tan fija que todo le es imposible.

 

A la dicha tiende, humano, que puedes

Labrar tu paso a dicha, a la que ruedes.

 

VEZ TAN SOLO EL TRISTE ¡ni una remedes!

 

 

* * *

 

 

4. Saeta silenciosa en este año de 2020

 

SAETA DEL ENCUENTRO DE JESÚS –CRISTO DEL AMOR Y DE LA PAZ- CON SU MADRE –VIRGEN DE LA SOLEDAD-.

(Mañana del Viernes Santo de Guadalajara, en la plaza del Jardinillo)

 

 

Virgen de la Soledad,

Inclinada tu cabeza

Reza toda tu belleza.

Gran manto: luto y beldad.

 

Enfrente a llegar empieza,

Nudoso sobre un madero,

Dios Jesús, el carpintero.

En cruz que Él mismo encabeza.

 

La plaza del Jardinillo,

A los dos hace pasillo.

 

Sobre ella, la Madre al Hijo

Ora y busca aún cobijo.

 

Las trompetas y trombones

Están ya en los corazones.

 

Dan el toque los tambores

A los que el clarín da sones.

 

Dios y su Madre ya están,

en el Encuentro de Arriaca.

                                         

¡Del Viernes es la mañana.

Pronto, otra vez se hallarán!

 

Dios y su Madre ya están,

en el Encuentro de Arriaca.

                                         

¡Del Viernes es la mañana.

Pronto, otra vez se hallarán!

 

 

 

Juan Pablo Mañueco

Premio Cervantes-Cela-Buero Vallejo 2016. 

Junta Comunidades Castilla-La Mancha

 

Vídeo autor: 

https://www.youtube.com/watch?v=HdKSZzegNN0&fbclid=IwAR1bQhQQ2TxgezSdKyMkdpTL-Pt6F7UM_GEmXvRxftRu5vAR_cXtSeJyR1E

 

Los tres poemas iniciales se estrenan ahora, en este medio; el cuarto figura en este libro de 2017, aún disponible en librerías: “Saetas a las Semanas Santas de España”, de las cuales hay una veintena referidas a la Semana Santa de Guadalajara, en todos sus días, cofradías e imágenes.