Perdóname, Señor

Rafael C. García Serrano

(Conferencia de Nª Srª de la Antigua, Guadalajara)

 

 

 

 

Por lo que pude hacer y no hice,

por lo que hice y nunca debí hacer,

perdóname, Señor.

 

Por la ignorante soberbia

de haber adorado a un dios

de barro, de mentira y sueños

y ese dios era mi egoísta yo

perdóname, Señor.

 

Porque después de conocerte

haber vivido ignorándote

y haberte hurtado mi amor,

perdóname, Señor.

 

Por haber jugado contigo

con trampas y sin pudor

creyendo que me escondía

y te engañaba mejor,

perdóname, Señor.

 

Por mirar hacia otro lado

cuando de frente venías

a enseñarme ese otro camino

de la verdad del amor,

perdóname, Señor.

 

Y por haber olvidado

a la Madre que me has dado

perdóname, Señor.