Dos poderosas razones añadidas para visitar Sigüenza y su catedral

Son la exposición ATEMPORA 2022 y la nueva iluminación exterior ornamental

 

Por Jesús de las Heras Muela

(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)

 

 

 

 

 

 

 

 

Inaugurada en la tarde del viernes 22 de julio, la exposición ATEMPORA 2022, bajo el título “ATEMPORA, Sigüenza 2022. Segontia entre el poder y la gloria”, responde al 900 centenario de la reconquista de Sigüenza y restauración de la histórica diócesis de Sigüenza. Y lo hace recorriendo 2.300 años de la historia de Sigüenza y su comarca a través de seis bloques que muestran 178 piezas de diferente naturaleza artística y cultural.

La exposición estará abierta de lunes a domingo entre las 10.30 y las 14:00 y de 16 a 19 horas. Puede visitarse hasta el 11 de diciembre. La entrada cuesta 8 euros. Se puede reservar la entrada en el teléfono 662 1875 08.

 

 

Los seis capítulos de la exposición

 

La exposición empieza en la panda norte del claustro donde el primer núcleo ofrece piezas arqueológicas de las épocas celtibérica, romana, visigótica e islámica. El segundo arranca en el claustro y se adentra en el tempo y relata el proceso de la reconquista de la ciudad, restauración de la diócesis y comienzo de la construcción de la catedral. El tercero, en la sacristía de las Cabezas, trata sobre la Universidad de Sigüenza.

En el cuarto, montado en la girola, se contemplan imágenes de Cristos y de Vírgenes desde el medievo al barroco. El quinto recrea el siglo de oro de la catedral en el amplio espacio que va de la capilla del Doncel a la de la Inmaculada a través del crucero, el coro y la nave del evangelio. Y el sexto, en la nave de la epístola, resume los siglos XVII, XVIII y XIX. 

 

Diez principales reclamos de la exposición

 

(1) En primer lugar, según se accede a la exposición, en la puerta de san Valero, puerta de entrada al claustro, al comienzo de la nave del evangelio, aparecen dos colosales esculturas de los arcángeles Gabriel y Miguel, tallas barrocas, del patrimonio catedralicio y restauradas con ocasión de la exposición.

(2) En el primer capítulo, la exposición muestra algunos de los vestigios arqueológicos recuperados por el Marqués de Cerralbo, en excavaciones llevadas a cabo a principios del siglo XX. Espadas y puntas de lanza recuerdan el carácter guerrero de este pueblo, mientras que broches, vasijas y fusayolas hablan de la vida cotidiana más allá de la guerra.

(3) Del segundo capítulo de la exposición, la sala románica o histórica sala capitular está dedicada a la construcción de la catedral de Sigüenza; y, de hecho, se trata de una de las salas más antiguas conservadas en este monumental edificio. Aquí podemos ver algunos de los instrumentos usados en su construcción, junto a dos magníficas maquetas que nos ilustran acerca de cómo fue creciendo el templo durante la Edad Media, en sus fases románica primero, y gótica después.

(4) Ya dentro de la catedral, en el transepto norte, en el extraordinario conjunto dedicado a santa Librada, el nuevo reclamo –quizás el principal o uno de los principales de la exposición- lo constituye la arqueta gótica de plata de comienzos del siglo XVI, mandado hacer por el obispo Simón Girón de Cisneros, que ha contenido las reliquias de esta santa aquitana virgen y mártir desde 1537.

(5) La exposición incluye la visita a la memoria de tres de los primeros obispos de Sigüenza, los tres del siglo XII: Bernardo de Agén, Pedro de Leucata y Martín de Finojosa. Del primero, el reconquistador de la ciudad, tenemos su tumba, al comienzo de la girola, tras la sacristía menor. Del segundo, frente a don Bernardo, vemos, a través de un monitor de televisión, su sepulcro de la capilla mayor de la catedral. Y del tercero, que es santo, una espléndida escultura barroca de finales del siglo XVII, ejecutada con ocasión de su canonización, perteneciente al patrimonio catedralicio, y su báculo, una auténtica joya del arte medieval, que se conserva habitualmente en el monasterio de Santa María de Huerta, del que también fue abad y donde está enterrado.

(6) La exposición incluye también la visita a la sacristía de las Cabezas, en la que, además, se hace memoria de la Universidad de Sigüenza.

(7) De los Cristos y Vírgenes expuestos en la girola, he aquí los enunciados telegráficos del Cristo de los cuatro clavos, del museo de la Trinidad de Atienza, del Cristo de los tres clavos de Madrigal, del Cristo de Alejo de Vahía y de la Virgen de la Paz (estos dos últimos de la catedral y recién restaurados).

 

 

(8)  Del espléndido quinto capítulo, la edad oro de la catedral seguntina (siglos XV, XVI y XVII), una parada obligatoria es frente al antiguo retablo de la familia de La Cerda Se trata de un retablo del siglo XV, de factura gótico-flamenca, de extraordinaria calidad, en el que se representan las vidas de San Juan Bautista y de Santa Catalina de Alejandría. Lo que se puede ver es una recomposición ideal del retablo, ya que una parte de sus tablas fueron desmembradas y vendidas por separado a diversos museos y particulares.  Gracias a la colaboración del Museo del Prado, donde actualmente se conservan cinco tablas de este retablo, ha sido posible plantear como debió ser su aspecto original

(9) Del capítulo sexto de la exposición, sito en la nave de la epístola, una primera cita obligada es ante un catafalco mortuorio procedente de la localidad de Atienza, que, a través de diversas frases escritas, recuerda que la muerte, antes o después, a todos alcanza.

(10) Y, ya en el final de la exposición, aparece una impresionante noria, procedente de las salinas de Imón, que se encuentran al norte de Sigüenza. Junto a ella podemos ver unas imágenes de cuando estaban en funcionamiento, a principios del siglo XX, y varios planos que nos recuerdan la importancia que la sal tuvo para toda la comarca.

 

La nueva iluminación exterior de la catedral

 

En la noche del martes 26 de julio, en acto institucional del más alto nivel regional, provincial y local, quedó inaugurada la nueva iluminación exterior ornamental de la catedral seguntina, fruto de un convenio de colaboración entre el la Fundación Iberdrola, el Cabildo Catedralicio y el Ayuntamiento de Sigüenza.

La catedral contaba con una iluminación exterior basada en proyectores de descarga de gran potencia situados tanto en el propio edificio como en las fachadas de los edificios colindantes, en incluso en báculos ubicados en los jardines y claustros que forman el conjunto catedralicio. Dicha instalación se encontraba obsoleta y con gran número de focos fuera de servicio.

El proyecto ha llevado a cabo una iluminación uniforme, de tipo medio, para evitar exceso de iluminación en la zona, respetando el entorno ambiental y, con ello, la posible reflexión al entorno cercano que provocaría el efecto de contaminación lumínica, teniendo especialmente en cuenta que toda la Sierra Norte de Guadalajara, incluido el municipio de Sigüenza tienen la certificación de Reserva Starlight, por parte de la Fundación Starlight.

 

 

Los objetivos del diseño de la nueva iluminación han sido los de definir su volumen completo, para que pueda ser observada en cada una de sus perspectivas urbana y de lejanía. Pero al mismo tiempo se ha logrado también modernizar la instalación con una reducción significativa del gasto energético que garantice su sostenibilidad.

El proyecto potencia los volúmenes del conjunto arquitectónico a la vez que se controla el resplandor luminoso nocturno, reduciendo la luz intrusa o molesta y dota a la catedral de una iluminación general, uniforme, tenue, mediante una temperatura de color de cálida (3000ºK), ejecutada esencialmente por inundación, en la búsqueda de dar unidad a la volumetría vista del edificio. Sobre esta iluminación general se resaltan diversos elementos mediante fuentes lumínicas de temperatura de color cálida más acentuada (2700ºK).

La nueva iluminación ornamental ofrece la versatilidad necesaria para dar respuesta a diferentes usos, tales como el nivel de iluminación de uso diario o la iluminación completa para eventos festivos o fines de semana.

 

Datos técnicos de la nueva iluminación

 

El proyecto se sirve de la tecnología LED más avanzada. La instalación ha sido pulcramente respetuosa con el edificio, manteniendo, en lo posible, las ubicaciones de focos anteriores y con anclajes en las juntas de la sillería con un criterio de reversibilidad si fuera necesario.

En total, se han colocado 150 luminarias (entre proyectores y lineales) con una combinación de temperatura de color cálida (< 3000lx), lo que aporta una reproducción cromática superior al 80%.  La potencia total instalada es de 6.346 W; esta potencia se corresponde con la iluminación completa, mientras que, de diario, sólo serán necesarios 49 luminarias con una potencia de, tan solo, 1,1 KW (para hacerse una idea, esa potencia es la que tiene un microondas).

 

 

La eficiencia y ahorro del proyecto está en el 72%, teniendo en cuenta que se han colocado más del doble de proyectores de los que había, para conseguir la iluminación 360º de la Catedral. El ahorro de emisiones de CO2 calculado sobre la base de la iluminación completa es de 3,2 toneladas de CO2 al año.

El importe final del proyecto es de 210.000 euros. Ha sido diseñado y desarrollado por el estudio Arquitectos DIRDAM36, colaboradores habituales de la Fundación Iberdrola. Y la ejecución ha corrido a cargo de la empresa especializada en patrimonio, VARONA, la cual se ha apoyado en una empresa local, Casas de la Alcarria, para las labores de obra civil.

 

Artículo publicado en 'Nueva Alcarria' el 16 de septiembre de 2022