El día del Corpus Christi se celebra con esplendor en todas las parroquias de la diócesis, con la celebración de la eucaristía y la posterior procesión eucarística por las calles.  Así, en la catedral de Sigüenza, la eucaristía será a las 11:30 horas, presidida por el obispo. A continuación, será la procesión, con el templete adquirido en el año del Gran Jubilar 2000.

En Guadalajara, el vicario general, a partir de las 10 horas, presidirá la eucaristía y la posterior procesión, con la Cofradía de los Apóstoles y varios tramos tapizados en la Calle Mayor, en Santo Domingo, en Santiago y en Santa María, entre otros reclamos especiales. El Santísimo saldrá en procesión en su templete, adquirido en el año 2006.

La fiesta del Corpus tiene en la diócesis otros epicentros celebrativos de interés como en Almonacid de Zorita, Albalate de Zorita y Marchamalo, localidades estas, al igual que otras más, donde los vecinos preparan alfombras de serrín de colores y de flores en las calles del recorrido de la procesión con el Santísimo.

También tiene singularidad especial la fiesta del Corpus en la localidad molinesa de Selas, donde, por privilegio papal de hace cinco siglos, salen juntos en la procesión en Santísimo Sacramento y la Virgen de la Minerva, patrona de Selas. Por otro lado, y ya en la octava del Corpus, el próximo domingo 26 de junio, la cita será en Valverde de los Arroyos con las danzas ante el Señor en la falda del Ocejón, Bien de Interés Cultural (BIC), en el apartado de bienes inmateriales, desde 2017.

El domingo 19, décimo tercer domingo del tiempo litúrgico ordinario, prácticamente toda la Iglesia celebra la solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre del Señor, el popular Corpus Christi. Es, junto con la tarde del Jueves Santo, el día por excelencia de la eucaristía: del pan y de la sangre de Jesucristo, que se queda en este sacramento admirable, que se da como comida y bebida y que llama a partir, compartir y repartir su cuerpo y su sangre.

Por ello, el día del Corpus Christi es también el día de la caridad. La caridad y eucaristía son las caras de la misma y única moneda: el amor incondicional, sin límites y sin fronteras, permanente y para todos, del amor de Dios, el amor de los amores, el amor que ha de ser amado y ha de ser transmitido y servido a los demás, especialmente a los más necesitados.

Esta jornada eclesial, el Día de la Caridad, el Día de Cáritas, conlleva colecta imperada en toda España y en la diócesis. “Somos lo que damos. Somos amor” es el lema de la Jornada, que coincide, además, con la celebración del 75 aniversario de Cáritas Española.

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El sábado 18 de junio se celebra el aniversario de la dedicación o consagración de la catedral diocesana. Desde el 19 de junio de 1169 vive esta consagración o dignidad que hace del templo lugar dedicado al culto religiosos cristiano. Al caer en domingo la fecha conmemorativa este año, se adelanta al sábado 18 la fiesta litúrgica. La celebración principal de los 853 años que cumple la catedral de Sigüenza será en la misa solemne anunciada para las 11 horas.

Monseñor Atilano Rodríguez, obispo de Sigüenza-Guadalajara, dedica la carta de esta semana a la ‘Asignación Tributaria’, como manifiesta el título. Tras recordar las etapas de este sistema de ayuda a la Iglesia católica, centra la mirada en el ejercicio de 2020, en que “los católicos españoles y muchas personas de buena voluntad asignaron a la Iglesia católica algo más de 297 millones de euros”. Por ello da las gracias a cuantos contribuyentes deciden que el 0,7% de su declaración sea a favor de la Iglesia católica y les anima a seguir haciéndolo.