"Somos una familia, un auténtico mogollón, una iglesia divertida que donde vamos armamos la de Dios..." Esta canción podría ser el mejor resumen de cada uno de los días que llevamos aquí, tanto por el grupo que estamos formando como por lo que nos hacemos notar.
Centrándonos en el día de hoy, empezamos con un gran madrugón para llegar pronto a nuestro punto de encuentro, la Iglesia, para ensayar las canciones de la misa. En ella compartimos micrófono con Ucrania y nos emocionamos con el testimonio de Karim. Siguiendo la jornada fuimos a los talleres. Nosotras nos apuntamos al de Hogar Ayuda Social, el cuál consistía en una visita a una residencia de ancianos, donde estuvimos acompañadas de muchos otros países y sin darnos cuenta hemos recibido más de lo que hemos dado.
Después de comer fuimos a la playa dónde compartimos un rato de tiempo libre y algunos valientes se dieron un chapuzón a pesar de la lluvia. Continuamos nuestra tarde haciendo misión por la misma zona, animando con cánticos y bailes, los cuáles nos ayudaban a informar e invitar al concierto del domingo, a la vez que compartíamos nuestra fe con los demás.
Para finalizar nuestro día hicimos un vía crucis por la calle mayor de Gdansk, en el que cada estación estaba dirigida por un país; y qué suerte la nuestra que, al terminar el acto, nos estaba esperando nuestro padre polaco con los brazos abiertos para regresar a casa, donde hemos disfrutado de una cena familiar llena de risas.
Un día más sumado a esta gran aventura en el que hemos aprendido a decir "Sí, porque Sí" como Jesús a María Magdalena.
Teresa, Laura y Ruth