La tradición santiaguista tiene legado múltiple en nuestra diócesis. Hay quince templos (capillas, iglesias, ermitas y parroquias) dedicados a Santiago Apóstol. Son las de Valdelculbo, El Cardoso de la Sierra, La Bodera, Valsalobre, Cendejas del Padrastro, Cubillejo de la Sierra, Labros, Solanillos del Extremo, la parroquia de la urbanización de Peñamira en Uceda y una de las parroquias de Guadalajara. Santiago fue también el titular de la parroquia del pueblo desaparecido de Torrecilla del Ducado, junto a Sienes. El templo está en ruinas al igual que acontece con un ermita jacobea en Yélamos de Arriba. En Albalate de Zorita hay también una ermita en honor del Apóstol y en Sigüenza un hermoso templo románico, muy dañado en la pasada guerra civil y cuyo exterior ha sido ahora restaurado. Fue el templo conventual de las Franciscanas, después trasladado a la iglesia de Nuestra Señora de los Huertos. En la catedral de Sigüenza, en el claustro, hay una capilla llamada de Santiago el Zebedeo.
La villa segoviana de Ayllón, hasta 1955 perteneciente al obispado histórico de Sigüenza, era vía subsidiaria del Camino de Santiago. Los peregrinos de nuestra antigua diócesis y los de la diócesis de Osma caminaban hasta Ayllón para seguir desde allí hasta Santo Domingo de Silos y empalmar en Burgos, con el camino francés, el, por excelencia, Camino de Santiago. También hubo rutas de interior hacia Santiago por la Alcarria cifontina y la llamada Hoya del Infantado dentro de la Vía de la Lana. Todas estas rutas han sido debidamente señalizadas y en sus municipios se ha instalado una estrella jacobea. Por otro lado, en el marco del Año Santo Compostelano 1993 nació en la capital provincial la Asociación de Guadalajara de Amigos de Santiago, que organiza y respalda peregrinaciones jacobeas. Su “alma mater” es José Luis Bartolomé.