El sábado 29 de octubre han sido beatificados en la catedral de Santa María de la Almudena de Madrid los benedictinos del monasterio de Montserrat de Madrid el P. José Antón Gómez, el P. Antolín Pablos Villanueva, el P. Rafael Alcocer Martínez (en la imagen), y el P. Luis Vidaurrázaga González, que fueron martirizados en la capital de España, en la segunda mitad del año 1936.
El P. Rafael Alcocer Martínez (1889-1936) descendía de Molina de Aragón. Su padre, Mariano Alcocer Martínez (1860-1944) había nacido en la capital del Señorío Molinés. El abuelo paterno, Mariano Alcocer era natural de Molina y la abuela paterna, Manuela Martínez, era natural de Taravilla.
En la checa de Ferraz, donde fue encarcelado, convivió durante cinco días con D. Antonio Cortés Moral, natural y párroco de Horche, de nuestra provincia y perteneciente entonces a la diócesis de Toledo, que también sufriría el martirio.
El Cardenal Angelo Amato, citando a Jacques Hamel, decapitado en Ruan el pasado 26 de julio, nos decía: La santidad es un don de Dios. Es Él el que nos hace santos. No tengamos miedo a la santidad.