Hace diez meses comenzó sus actividades orientativas la comisión designada por el obispo para la reforma de los arciprestazgos y de las unidades de acción pastoral (UDAPs). Lo encabeza el vicario episcopal para Sigüenza y las zonas rurales, Jesús Molina Alcántara.
Este equipo envió a todos los sacerdotes un boceto del nuevo mapa pastoral diocesano, que necesita ajustarse al menor número de sacerdotes y de fieles en extensas zonas de la geografía diocesana. Con tal visión se agruparían en uno los arciprestazgos de Pastrana-Mondéjar y Sacedón, por una parte, y otro tanto harían Cogolludo-Jadraque y Yunquera-Hita. A la vez, es necesario definir las parroquias que integran cada UDAPs según proximidad, facilidad de comunicación y número de párrocos disponibles. Sobre ese mapa se han ido haciendo modificaciones que en su momento ha estudiado el Consejo de Presbiterio y ahora llegan al plazo final.
En estas semanas, el clero de cada arciprestazgo está cerrando su estudio y elaborando aportaciones para enviarlas al Consejo Episcopal de cara a la asamblea de todos los sacerdotes que el obispo, mons. Atilano Rodríguez, ha anunciado para el final del primer trimestre del nuevo año.