El dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, cuyo responsable es el cardenal Peter Turkson, ha convocado un Encuentro Internacional de Organizaciones Sindicales, que ha reunido a los principales sindicatos del mundo los días 23 y 24 de noviembre, en el Aula Nueva del Sínodo. Está previsto que participen, entre otros, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), el Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos (MMTC), al que pertenece la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC); y la Comisión Episcopal de Pastoral Obrera de la Conferencia Episcopal Española (CEE).
Por parte de la Pastoral Obrera de la CEE han participado el obispo emérito de Ciudad Real y responsable de esta Pastoral, Mons. Antonio Algora, y el Consiliario General de la HOAC, Fernando Díaz.
Doctrina social de la Iglesia
Con el lema “De Populorum progressio a Laudato si”, el encuentro ha reflexionado sobre los temas “el trabajo y el movimiento de los trabajadores en el centro del desarrollo humano integral, sostenible y solidario” o “¿Por qué el mundo del trabajo sigue siendo la clave del desarrollo en el mundo global?”.
En la propuesta y documento preparatorio se hace referencia a las encíclicas ‘Populorum progressio’, sobre el desarrollo de los pueblos; ‘Sollicitudo rei socialis’, sobre la preocupación social de la Iglesia, ‘Laborem exercens’, sobre el trabajo humano, ‘Caritas in veritate’, sobre el desarrollo humano integral y ‘Laudato si’, sobre el cuidado de la creación.
El Movimiento de Trabajadores Cristianos (MTC) y la Hermandad obrera de Acción Católica (HOAC) explican la importancia y actualidad de este encuentro. “La aportación de cinco Papas ponen en valor la vigencia del pensamiento social de la Iglesia en relación con el trabajo y el desarrollo humano integral, sostenible y solidario”, afirman desde los movimientos de trabajadores cristianos. La Iglesia vuelve a poner el foco en el trabajo humano y en la dignidad de la persona. El papa Francisco insistente en la importancia del trabajo digno en la lucha contra la pobreza, priorizando la atención evangélica en las periferias, entre quienes sufren «la cultura del descarte» .