Animada por alumnos de los Ciclos Formativos y el equipo de Pastoral, del 5 al 9 de febrero se desarrolla la Semana de Solidaridad siguiendo la llamada de Manos Unidas para ayudar a los más desfavorecidos del planeta.
El programa abre cuatro ámbitos de acción. Por una parte, las celebraciones solidarias y de sensibilización cristiana de la mañana del jueves 8, complementadas con la Feria de Juegos para Infantil y Primaria.
A ellas se suma, ese mismo día, el rastrillo solidario, para el que toda familia y alumnos que quieran pueden llevar productos (juguetes, artesanías, manualidades, bisutería, postres caseros, bombones, golosinas...), con los que se montarán dos mercadillos. Y por otro lado, el clásico "bocata solidario", que será viernes, 9 de febrero, en el recreo.
El año pasado, el colegio diocesano Cardenal Cisneros entregó a Manos Unidas algo más de dos mil euros para la Campaña contra el Hambre. Los donativos de todos los colegios colaboradores, públicos y privados, alcanzó la cifra de 13.473, 46 euros, según recoge la Memoria-2017 de Manos Unidas.