En la misa coral del sábado 11 de mayo, a las once horas, las Hermanitas de los Ancianos Desamparados de Sigüenza ofrecieron a la catedral un precioso mantel blanco, con remate de puntillas en oro, para la celebración de la eucaristía en el altar mayor del templo. Se eligió tal día por conmemorarse a Nuestra Señora de los Desamparados, patrona de la congregación de don Saturnino y de santa Teresa Jornet Ibars.
El regalo de las Hermanitas a la catedral seguntina se suma, de este modo, a los realizados por las Hermanas Clarisas y las Hermanas Ursulinas, en febrero pasado ambos, y consistentes, respectivamente, en una casulla bordada y en el libro litúrgico de los Santos Evangelios (Evangeliario), con cubierta en piel, cantos dorados y el logo jubilar en la contraportada.