Desde la delegación diocesana de apostolado seglar este pasado 6 de Julio, hemos vivido la XVII jornadas de “vida monástica y seglares”. Nos juntamos setenta y cuatro personas, de distintos movimientos, asociaciones y parroquias.
Las hermanas nos hicieron partícipes de su alegría, una alegría que nace de la oración, de la intimidad con Dios. Compartimos su día a día, y pudimos comprobar que cuando el Señor, te llama, esa primera llamada, ese encuentro no se olvida y es para siempre.
“Contemplar y dar lo contemplado”
Nos dijeron que a veces intentamos compaginar a Dios con todo, pero ante El, pregúntale, ¿Cuál es mi sitio?, y junto a Él busca la respuesta, una buena pregunta, en nuestro camino sinodal.
Tras, una buena comida, ya en Santo Domingo de Silos, el día nos deparó otro gran regalo, la Eucaristía, y la visita al claustro de Silos, sentir como desde hace mil años hay vida entre esta maravilla arquitectónica, que han dejado los que nos antecedieron en la FE. Concluimos con la oración de vísperas junto a los monjes.
Un día intenso, sintiéndonos mimados por el Señor, con tanta alegría compartida.
Ana I. Gil
Delegada dioc. A. Seglar