Dos propuestas para los jóvenes mayores merecen destacarse en estas semanas, ambas lanzadas desde la Pastoral de Juventud: un convivencia de estudiantes y unos ejercicios espirituales. La primera se ha desarrollado durante la primera semana de febrero en Casa María Madre.
Era para estudiantes universitarios y de ciclos superiores y han participado en torno a la treintena de jóvenes. Este tipo de actividad deja media jornada para los quehaceres estudiantiles y dedica la otra media a la convivencia, la reflexión y el intercambio de experiencias religiosas. Y la segunda tendrá lugar en el monasterio de Buenafuente del Sistal los días 20,21 y 22.
La Delegación diocesana de Juventud dirige una y otra propuesta a jóvenes mayores de 18 años con miras a consolidar su compromiso de vida cristiana.