En razón de pandemia y de las medidas de contención de la misma, la novena y fiesta de la Virgen de la Antigua, patrona de la ciudad de Guadalajara, serán este año muy distintas. No habrá procesión ni ofrenda floral del 8 de septiembre.
La novena, que discurre desde el 30 de agosto al 7 de septiembre, se celebrará en todas las parroquias de la ciudad y en el santuario, en sus horarios vespertinos habituales de las celebraciones eucarísticas. Y del mismo modo, la fiesta del 8 de septiembre, cuya misa principal presidirá el obispo diocesano en el santuario de Virgen de la Antigua, a las 12 del mediodía.
Los materiales pastorales para el desarrollo de la novena son comunes para todas las parroquias y para el santuario. Han sido preparados por el arciprestazgo de Guadalajara. Así, bajo la advocación general de Virgen de la Antigua, se tienen en cuenta cada día algunas advocaciones marianas de especial devoción popular en la ciudad de Guadalajara (Amparo, Dolores, María Auxiliadora, Soledad y Desamparados), las tres nuevas invocaciones que el Papa Francisco ha añadido a las letanías lauretanas (Apoyo del migrante, Madre de Misericordia y Madre de Esperanza) y ya el último día, lunes 7 de septiembre, y como colofón, resumen y síntesis de las celebraciones en este tiempo de pandemia se invocará especialmente a Santa María como consuelo de los afligidos.