En una nota informativa del 24 de febrero, monseñor Atilano Rodríguez pide a las comunidades de toda la diócesis tener una jornada de ayuno y oración el Miércoles de Ceniza, inicio de la Cuaresma. De este modo, se une al llamamiento que ha hecho el papa Francisco a creyentes y no creyentes del mundo entero. Don Atilano también ruega a los sacerdotes hacer plegarias expresas por la paz en las eucaristías dominicales. Pide, además, que se implore a la Virgen María, la Reina de la Paz, con el rezo del Santo Rosario para que, como solicita el papa Francisco, ella interceda para que “preserve al mundo de la locura de la guerra”.