En Madrid, donde vivía desde hace años, recién cumplidos los 93 años, falleció, el 11 de abril, el sacerdote incardinado en nuestra diócesis Severino de Francisco de Miguel. Nació en Rienda el 8 de abril de 1930 y fue ordenado sacerdote en Sigüenza el 12 de septiembre de 1954. Tras atender, sucesivamente, las parroquias de Miedes y de Atienza, con sus anejos, ingresó en el cuerpo de capellanes castrenses, donde llegó a ser coronel capellán. Su último servicio fue en el Hospital Gómez Ulla de Madrid.
Sus periodos vacacionales los pasaba en Rienda y en Sigüenza, colaborando, mientras la salud se lo permitió, con la atención ministerial a su parroquia natal. Su funeral fue en la iglesia parroquial de Santa María de Sigüenza, en cuyo cementerio interparroquial fue inhumado.