El domingo que hace octava de Navidad, las comunidades católicas tienen dos motivos importantes a considerar y celebrar. El primero es la fiesta con rango de solemnidad que centra la mirada en Santa María como ‘Madre de Dios’. Ocho días antes la atención recaía sobre el hijo, en la octava recae sobre la divina madre. Y el segundo es la Jornada Mundial de la Paz. En el día que abre el año, desde hace 57 ya, se invita a que fieles y comunidades reflexionen sobre el don de la paz y los retos diversos que su cuidado y desarrollo van pidiendo; también se anima a elevar plegarias a Dios por la paz en el mundo.
El mensaje del papa Francisco para esta 57 Jornada Mundial de la Paz, que se celebra el lunes 1 de enero de 2024 con el lema «Inteligencia artificial y paz», aborda los retos y las incógnitas que la IA está planteando ya. Francisco pide esfuerzos para que la inteligencia artificial «pueda contribuir a la resolución de conflictos y de las injusticias» y que sea una aportación a la «fraternidad humana y a la paz». Y afirma, en línea con su pensamiento social, que los adelantos de las nuevas tecnologías «si agravan las desigualdades y los conflictos no pueden considerarse verdadero progreso».