Tras cinco años de presencia de la curia diocesana en la sede del obispado el Guadalajara, el obispo de la diócesis, Atilano Rodríguez, ha bendecido en la mañana del martes 27 de octubre, la instalación que albergará documentación de diversa importancia, que los trámites curiales generan en el trabajo diario.
El espacio reservado para archivo se sitúa en la planta sótano del edifico de la calle Mártires Carmelitas de Guadalajara, en el que además se encuentran los distintos despachos de los componentes de la curia, una pequeña capilla, varias salas para reuniones, un salón de actos, que sirve además para los encuentros con la prensa, así como la vivienda del obispo y de otros sacerdotes.
El archivo que hoy ha sido bendecido cuenta con 2.204 metros lineales de estanterías para conservar documentos. Se ha hecho entrega de la llave del mismo al notario general de la diócesis, Miguel Almansa, para que la custodie hasta el nombramiento definitivo del responsable del mismo.
