Del 31 de octubre al 9 de noviembre de 1982, Juan Pablo II visitó 18 ciudades españolas, en 11 comunidades autónomas, en viaje seguido por millones de personas
Por Jesús de las Heras Muela
(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)
España quería una visita papal. La esperaba y la anhelaba, máxime cuando comprobaba como Juan Pablo II era el Papa viajero -ya, hasta febrero de 1981, había realizado nueve viajes apostólicos, que le habían llevado a veinte países de los cinco continentes, entre ellos México, Polonia, Irlanda, USA, Francia, Alemania, Brasil, amén de Italia- y como sus visitas apostólicas a otros países eran inequívoco tiempo de gracia. Además, iba a ser el primer Sucesor de San Pedro en realizar una visita oficial a España.
Un viaje esperado durante trece meses y hasta en un hilo…
El Santo Padre Juan Pablo II iba a haber venido a España en octubre de 1981, tres años después de su elección pontificia. Cinco meses antes, el 13 de mayo de 1981, estuvo a punto de morir en el atentado de Ali Agca. La agenda viajera papal quedó cancelada. El contexto de la visita papal era la apertura del IV centenario de la muerte de Santa Teresa de Jesús.
Una vez recuperado del atentado, el viaje se fijó para octubre de 1982. El 15 de octubre clausuraría el centenario teresiano. Pero el segundo atentado contra Juan Pablo, el perpetrado en Fátima, 12 de mayo de 1982, por Juan Fernández Krohn, volvió a suscitar dudas sobre la viabilidad del viaje. Sin embargo, el atentado no tuvo consecuencias importantes en la salud de Juan Pablo II, y se mantuvo el plan previsto.
Con todo, a finales de agosto de 1982, el entonces presidente del Gobierno español, Leopoldo Calvo Sotelo, anunció la disolución de las Cortes y la convocatoria anticipada de elecciones generales para el 28 de octubre. Según lo previsto, Juan Pablo II habría de estar en España del 14 al 23 de octubre, en plena campaña electoral. A fin de no interferir en la misma, el viaje sufría un nuevo retraso, fijándose sus fechas del 31 de octubre al 9 de noviembre y posponiéndose la clausura del Año Teresiano al día 1 de noviembre, solemnidad de Todos los Santos.
San Juan Pablo II
“Testigo de la Esperanza”
La frase “Testigo de Esperanza” fue el lema de una visita apostólica espléndidamente preparada en las diócesis y esperada con ardor e ilusión por todo el Pueblo de Dios.
El Papa Juan Pablo II tuvo como residencia durante todos los días de su viaje pastoral a España la sede de la nunciatura apostólica en Madrid. Allí regresó todas las noches y de allí partió a las distintas etapas de su periplo. Era nuncio apostólico en España monseñor Antonio Inocentti.
El Santo Padre se desplazó por España en un helicóptero de la Fuerza Aérea Española, pilotado habitualmente por el general Ignacio Martínez Eiroa. Una de las anécdotas del viaje fue el discurso de bienvenida a Madrid que le dirigió el entonces alcalde de la Villa, Enrique Tierno Galván, quien habló en lengua latina. Por cierto, el ayuntamiento de Madrid decidió dedicar una calle a Juan Pablo II (se pensó en la calle Añastro, sede la Conferencia Episcopal Española), decisión que nunca se ha llevado a efecto.
El coordinador de parte de Estado Español de este viaje fue el diputado nacional de UCD Luis Apostua Palos, ex subdirector del diario “YA” de Madrid y entonces director general de Asuntos Religiosos. El coordinador de parte de la Santa Sede del viaje fue el padre jesuita Roberto Tucci. Por parte de la Conferencia Episcopal Española, los coordinadores fueron el obispo secretario general, Fernando Sebastián Aguilar, y los dos vicesecretarios, José María Eguaras Iriarte y Bernardo Herráez Rubio
La Iglesia y España en 1982
El presidente de la CEE durante este primer viaje del Papa era el arzobispo de Oviedo, Gabino Díaz Merchán, elegido para este cargo, en sustitución del cardenal Vicente Enrique y Tarancón, todavía arzobispo de Madrid, en febrero de 1981. José Delicado Baeza, arzobispo de Valladolid, era el vicepresidente. Desde junio de 1982, el entonces obispo de León, Fernando Sebastián Aguilar, era el secretario general de la CEE.
Eran pastores de las diócesis españoles visitadas por el Papa los siguientes prelados: cardenal Vicente Enrique y Tarancón, de Madrid; obispo Felipe Fernández García, de Ávila; obispo Mauro Rubio Repullés, de Salamanca; cardenal Marcelo González Martín, de Toledo; obispo Antonio Palenzuela Velázquez, de Segovia; arzobispo José Méndez Asensio, de Granada; arzobispo Carlos Amigo Vallejo, de Sevilla; obispo José Mª Setién Alberro, de San Sebastián; arzobispo José María Cirarda Lachiondo, de Pamplona y Tudela; arzobispo Elías Yanes Álvarez, de Zaragoza; cardenal Narciso Jubany Arnau, de Barcelona; arzobispo Miguel Roca Cabanellas, de Valencia; y arzobispo Ángel Suquía Goicoechea, de Santiago de Compostela. Todos ellos ya han fallecido.
El Gobierno de España estaba presidido en funciones por Leopoldo Calvo Sotelo, del partido de la Unión del Centro Democrático (UCD), una vez que el 28 de octubre anterior, se celebrasen elecciones generales legislativas en España, en las que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) obtuvo una muy holgada mayoría absoluta (202 diputados de 350 escaños).
18 ciudades, 57 discursos
El Santo Padre Juan Pablo II visitó un total de 18 ciudades (Madrid, Ávila, Alba de Tormes, Salamanca, Guadalupe, Toledo, Segovia, Sevilla, Granada, Loyola, Javier, Zaragoza, Montserrat, Barcelona, Valencia, Moncada, Alcira y Santiago de Compostela) pertenecientes a 11 comunidades autónomas: Madrid, Castilla y León, Extremadura, Castilla-La Mancha, Andalucía, País Vasco, Navarra, Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana y Galicia.
Juan Pablo II pronunció en España un total de 57 discursos, a los que hay añadir un mensaje previo, la alocución del Ángelus en Roma del domingo 31 de octubre de 1982 y la posterior catequesis de la audiencia general de los miércoles (17-11-1982)
Todos los actos del Papa fueron seguidos por miles y miles de personas. En la Misa de las Familias de la plaza de Lima de Madrid, el 2 de noviembre, y el encuentro con los jóvenes, en el estadio Santiago Bernabéu, también en Madrid, participaron en torno a medio millón de personas. Fueron los dos actos más multitudinarios.
TVE transmitió en directo todos los actos de este viaje papal. La cobertura ofrecida por los otros medios de comunicación fue también excepcional. Uno de los titulares de prensa escrita que más célebres se hicieron fue el de un diario que tituló a toda plana, tras marcharse Juan Pablo II: “Huracán Wojtyla”.
“La visita del Papa y el servicio a la fe de nuestro pueblo”
Juan Pablo II se encontró con distintos y numerosos colectivos de la Iglesia y la sociedad españolas: los obispos, los monjes y monjas de clausura, los teólogos, las autoridades y los representantes del pueblo, los diplomáticos, los empresarios de los medios de comunicación, los periodistas e informadores, las familias, los jóvenes, los representantes del judaísmo y de otras confesiones cristianas no católicas, los universitarios, los profesores, académicos, científicos e intelectuales, los obreros, los emigrantes, los representantes de los grupos, asociaciones y movimientos de apostolado seglar y cofradías y hermandades, los educadores cristianos, los catequistas y los niños, los religiosos, las religiosas y los miembros de los Institutos Seculares, los misioneros y las misioneras, los enfermos y los minusválidos, los trabajadores y empresarios, los mayores, los sacerdotes y los seminaristas, las víctimas de las catástrofes naturales, los hombres y mujeres del mar, políticos vinculados con Europa y, sobre todo, con el pueblo, con el pueblo de Dios que peregrina en la Iglesia Católica en España.
La doctrina predicada por el Santo Padre durante su viaje apostólico a España y sus interpelaciones y retos constituyeron la base del Plan Pastoral que la Conferencia Episcopal Española aprobó meses después, ya en 1983, bajo el título “La visita del Papa y el servicio a la fe de nuestro pueblo”.
Tapiz dedicado a san Juan Pablo II
Este viaje del Papa en nuestra diócesis
Para nuestra diócesis de Sigüenza-Guadalajara este primer de Juan Pablo II a España fue también muy importante y secundado. El entonces obispo diocesano, Jesús Pla Gandía, creo una comisión para la preparación y participación en el mismo. Dicha comisión fue coordinada por Victorio Lorente, entonces párroco de San Juan de Ávila de Guadalajara, y Manuel Ortega, guardián de los Franciscanos de El Carmen de Guadalajara.
Se organizaron cinco viajes para acompañar al Papa. Dos de ellos, a Madrid: el 2 de noviembre para participar en la misa de la Plaza de Lima, misa dedicada sobre todo a las familias; y el día 3 para el encuentro del Papa con los jóvenes en el estadio de fútbol Santiago Bernabéu de Madrid. Ambos fueron los actos más multitudinarios de la visita papal.
También hubo peregrinación diocesana para el encuentro de Juan Pablo II con el apostolado seglar organizado, llevado a cabo en Toledo, el 4 de noviembre, y para el acto mariano nacional del sábado día 6 en Zaragoza, en la Plaza de la Virgen del Pilar. Asimismo, hubo peregrinación, sobre todo sacerdotal, a Valencia, el lunes 8 de noviembre, para la misa en la que Juan Pablo II ordenó a 141 nuevos sacerdotes, de ellos 8 de nuestra diócesis, entre los cuales se hallaba quien suscribe estas líneas.
El Papa viajero por excelencia
Una de las características más acusadas del pontificado de san Juan Pablo II -¡y fueron tantas!- fue precisamente su índole de papa viajero. En los veintiséis años y medio de su ministerio apostólico petrino, realizó 104 viajes, visitando 129 países (este número a día de hoy sería superior con el surgimiento de nuevos estados en Europa y en otros continentes.
A España, vino en 5 ocasiones. Tras Polonia (9) y Francia (7), y junto a USA y a México (5), el país más visitado. Recorrió 1.200.000 kilómetros por los cinco continentes. Dentro de Italia, realizó 146 viajes. Su primer viaje fue del 25 de enero al 1 de febrero de 1979 con destino a República Dominicana, México y Bahamas y el último, los días 14 y 15 de agosto de 2004, al santuario francés de Lourdes. Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005. Había nacido el 18 de mayo de 1920. Fue beatificado el 1 de mayo de 2011 y canonizado el 27 de abril de 2014. Era, como es bien sabido, de nacionalidad polaca.
Los cinco viajes de Juan Pablo II a España
Juan Pablo II en Madrid en junio de 1993
(1) 31-10 a 9-11-1982: Madrid, Ávila, Alba de Tormes, Salamanca, Guadalupe, Toledo, Segovia, Sevilla, Granada, Loyola, Javier, Zaragoza, Montserrat, Barcelona, Valencia, Moncada, Alcira, Santiago de Compostela. Lema: “Testigo de esperanza”.
(2) 10/11-10-1984: Zaragoza: 15 horas, cuatro actos y despedida (10 y 11-10). Lema: “Testigo del Evangelio”.
(3) 19/21-8-1989: Santiago de Compostela (III JMJ, “Jesucristo, Camino, Verdad y Vida”), Oviedo, Covadonga (de modo privado, visitó los lagos de Covadonga y Cangas de Onís), en Asturias el lema fue “Testigo de fe”.
(4) 13/17-6-1993: Sevilla, Dos Hermanas, Huelva, La Rábida, Palos de la Frontera, Moguer, El Rocío, Madrid. LX Congreso Eucarístico Sevilla 1993: “Jesucristo, luz del mundo”, V Centenario Evangelización de América, consagración de la catedral de la Almudena. En Huelva y diócesis, el lema fue “El Papa, en los lugares colombinos, en el V Centenario de la evangelización de América, y por una nueva evangelización”. En Madrid, el lema fue “El Papa viene a verte”.
(5) 3 y 4-5-2003: Madrid, con el lema “Seréis mis testigos”.
Artículo publicado en 'Nueva Alcarria' el 28 de octubre de 2022