"Frenar la desigualdad está en tus manos" es el lema de la campaña de 2023 de Manos Unidas que busca un mundo más justo y erradicar el hambre
Por Jesús de las Heras Muela
(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)
La Campaña contra el Hambre fue lanzada por la FAO y tiene su origen en el Manifiesto de la Unión Mundial de Organizaciones Femeninas Católicas (UMOFC) en 1955, en el que se decía: “Sabemos, y queremos que se sepa, que existen soluciones de vida, y que, si la conciencia mundial reacciona, dentro de algunas generaciones las fronteras del hambre habrán desaparecido…”. Y concluía diciendo: “Declaramos la guerra al Hambre”.
Hace 64 años, un grupo de mujeres españolas de Acción Católica, haciéndose eco del manifiesto publicado cinco años antes por la Unión Mundial de Organizaciones Femeninas Católicas (UMOFC), plantaron la semilla de lo que hoy es Manos Unidas, ONGD (Organización no gubernamental para el desarrollo), integrada por voluntarios y perteneciente a la Iglesia católica en España.
Desde los albores de la campaña contra el hambre, se fijó el segundo domingo del mes de febrero, como fecha de la jornada y de su cuestación. Además, el viernes previo, en este caso, hoy 10 de febrero, quedó fijado como Día del Ayuno Voluntario y la semana previa como la semana de lanzamiento de la campaña, este año 2023. Además, Manos Unidas prolonga durante todo el año su campaña. “Frenar la desigualdad está en tus manos” es su lema para 2023.
En la actualidad, Manos Unidas cuenta con 6.344 personas voluntarias y 144 contratadas y 71.159 socios.
Mujeres al frente de Manos Unidas
En junio pasado y tras los seis años estatutarios, la madrileña Clara Pardo Gil, de 61 años, casada y madre de dos hijos, licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales, cedió la presidencia de Manos Unidas a Cecilia Pilar Gracia, extremeña de 67 años, licenciada en Geografía e Historia, casada, madre y abuela y voluntaria de Manos Unidas desde 2010.
Carmen de Miguel, Ana de Felipe, Consuelo Lobo, Ana Álvarez de Lara, Begoña Burgos, Myriam García Abrisqueta, Soledad Suárez y la ya citada Clara Pardo Gil han sido las anteriores presidentas nacionales de Manos Unidas.
También una mujer, Elena Garvia Benavente es, desde hace siete años y medio, la responsable en nuestra diócesis de Sigüenza-Guadalajara de Manos Unidas. Le han precedido en este servicio diocesano Julia Vega Gómez, Isabel Jabaloyes Ayuso, Ángeles Labrador Moreno, Isabel Sánchez Fernández, Antonia Sánchez Abad, Pilar Simón Romero e Isabel Moratilla Parra.
474 proyectos, 51 países, 34 millones de euros
En 2021, última campaña de Manos Unidas plenamente cerrada y auditada, la institución aprobó 474 proyectos de ayuda al desarrollo el tercer mundo, destinados a 51 países distintos y por un valor total de 33.449.396 euros.
El 42,8% de los ingresos de recaudación de Manos Unidas provinieron de socios y donantes; el 21,5%, de herencias y legados; 16,2%, de parroquias y entidades religiosas; el 8,6%, de convenios con las administraciones públicas; el 5,8%, de colegios, campañas de emergencias y de sensibilización y de ingresos financieros y privados; y el 5,1%, de la Agencia Española de Cooperación Internacional del Desarrollo (AECID).
La distribución de los gastos es esta: 83,5%, proyectos de desarrollo; 8,1&, administración y estructura; 5,1%, campañas de sensibilización; y 3,3%, promoción y captación de recursos.
Frenar la desigualdad está en tus manos
Ayudas por continentes y por sectores
Desglosando las ayudas de Manos Unidas en 2021, esta ONGD católica distribuyó los ya citados 33.449.396 euros en 474 proyectos en 51 países. Por continentes, a África se destinó el 38%, en 30 países, en 181 proyectos, por un importe total de 11.232.193 euros. Catorce países de América Latina recibieron 14. 661.041 euros, en 150 proyectos, lo cual supuso el 32% de los proyectos desarrollados. Y a Asia, con el 30% de los proyectos, se destinaron 7.556.165 euros, en 7 países y 141 proyectos. Etiopía, Haití e India fueron los países de cada uno de estos tres continentes más ayudados.
Por sectores, el número mayor porcentaje de proyectos fueron destinados, en primer lugar, a programas de educación, el 23%, con 108 proyectos; y también con el 23%, alimentación y medios de vida, con 110 proyectos.
Con el 20% y 94 proyectos, ayuda a la salud es el tercer sector más ayudado. Le sigue, con el 15% y 70 proyectos, los programas en favor de los derechos de las mujeres y de equidad. El 12% y 56 programas se destinaron derechos humanos y sociedad civil; a agua y a saneamientos, el 9% y 24 proyectos; y, finalmente, el 2% para medio ambiente y cambio climático, con 12 proyectos.
Recaudación en Sigüenza-Guadalajara
La cuestación de la campaña contra el hambre es en nuestra diócesis es la que mayor cifra alcanza de recaudación entre las once colectas imperadas de cada año. En 2022, esta colecta alcanzó en nuestra diócesis la cantidad de 236.212,82 euros. Es una muy notable cantidad, que ha superado en 13.000 euros la del año 2021. Los donativos particulares volvieron situarse en torno al 50% del total recaudado y la principal fuente de ingresos (111.382 euros), eso sí, 16.00 euros menos que el año pasado. Las colectas en las parroquias, segunda fuente de financiación, fue de 57.793.88 euros, quinientos euros más que en 2021. Y la tercera fuente fueron las comunidades de vida consagrada: 12.745 euros, superior en más de cuatro euros a la recaudación de 2021.
Las actividades y conciertos organizados por Manos Unidas de la diócesis en 2022 recaudaron 11.006, 25 euros. En los colegios, hubo un aumento de dos mil setecientos euros: en 2022, 6.834,61 euros.
Por su parte, el ayuntamiento de Guadalajara y Manos Unidas suscribieron un convenio de cofinanciación de proyectos, por un importe de 30.671,43 euros.
En relación con los gastos, el total ascendió a 10.188,6 euros, dos mil euros menos que el año anterior. El porcentaje de gastos sobre ingresos fue de 4,31%, mientras que en el año anterior fue de 5,40 euros.
En cuanto a las actividades de Manos Unidas de la diócesis en estos días, el lanzamiento de campaña fue el martes 7 de febrero, a las 18:30 horas, en el salón de actos de JCCLM (calle Topete de Guadalajara), con el testimonio de la religión de la Asunción, hermana María Teresa del Rosario García.
El jueves 9 hubo en Azuqueca de Henares una eucaristía y cena del hambre. El viernes 10 es el Día del Ayuno Voluntario, de la lectura del manifiesto de campaña y de la eucaristía, seguida de cena del hambre, todo ello preparatorio para el domingo de la colecta. Esta eucaristía del viernes 10 de febrero esa las 18:30 horas en El Salvador de Guadalajara, presidida por el obispo diocesano.
Modos de colaborar con la Campaña contra el Hambre
Se trata de ejercitar la imaginación de la caridad. Así, junto al tradicional donativo en los sobres, hay cuentas bancarias (en Sigüenza-Guadalajara, en IberCaja ES62 2085 7605 9103 0026 0004 y/o en La Caixa ES52 2100 8756 1822 0034 0706); hay un número de teléfono específico; 900 811 888; la página web www.manosunidas.org; y el servicio de bizum en la app del banco del donante en el número 33439; además de donativos mediante tarjetas bancarias electrónicas. Y los donativos a Manos Unidas desgravan en la declaración de la renta.
No podemos tener razones que frenen nuestra generosidad, compromiso y solidaridad. Solo contagiando solidaridad acabaremos con el hambre, una pandemia que afecta de modo severísimo a no menos de 830 millones de personas en todo el mundo. Esto significa que cada minuto que pasa mueren a causa del hambre entre 5 y 11 personas. Y esto es intolerable.
Y como ejemplo, he aquí lo que cada uno puede lograr con su donativo: con 30 euros se facilitan 65 kilos de maíz para cultivos familiares en Etiopía; con 70 euros se garantizan el acceso a la educación a más de 20 niñas en India; con 100 euros se dotan a centros sanitarios de 10 lotes de material quirúrgico para cesáreas.
Cartel Campaña contra el Hambre 2023
Manifiesto de la Campaña contra el Hambre 2023
El manifestó de la Campaña contra el Hambre que Manos Unidas realiza este año y que es leído, por distintos medios y soportes, en la tarde de este viernes 10 de febrero, Día del Ayuno Voluntariado en toda España, se divide en estos tres apartados y es, íntegramente, el siguiente:
DENUNCIAMOS que la brecha de desigualdad sigue creciendo en nuestro mundo y que:
(1) Los beneficios de la globalización han marcado un panorama profundamente desigual, enriqueciendo de manera exorbitada a una parte pequeña de la población, mientras cientos de millones de personas siguen siendo extremadamente pobres. Así, el 1 % más rico acumula casi el 50 % de toda la riqueza global, mientras el 50 % más pobre apenas posee el 1,5 % de la riqueza total.
(2) Más de una cuarta parte de los trabajadores del Sur son pobres, siendo sus salarios insuficientes para cubrir sus necesidades básicas y las de sus familias.
(3) Todavía hay 828 millones de hambrientos y se estima que cada cuatro segundos muere una persona por esta causa.
(4) Unos 570 millones de mujeres de entre 15 y 45 años sufren anemia.
(5) Cerca del 50 % de las personas que pasan hambre en el Sur pertenecen a familias agricultoras rurales que, trabajando en explotaciones de menos de dos hectáreas, producen en torno al 35 % de los alimentos que se consumen a nivel mundial, y hasta el 80 % en continentes como África o gran parte de Asia
DEMANDAMOS:
(1) Que se limen las desigualdades que atentan contra la dignidad humana; impiden que cada persona pueda vivir con las necesidades básicas cubiertas y con sus derechos fundamentales garantizados y son contrarias a las más hondas convicciones creyentes.
(2) Que se impulse un desarrollo inclusivo y respetuoso con el medioambiente.
(3) Que se favorezca el papel del trabajo como vía de desarrollo personal y familiar. Y el trabajo digno para dignificar la vida de los trabajadores y acabar con la discriminación laboral de las mujeres.
(4) Que se pongan en marcha las políticas públicas de inserción, fundamentadas en una fiscalidad justa, y se promueva la participación y la democracia.
PROPONEMOS:
(1) Que institucionalmente se fomente el trabajo digno, en el que se respeten los derechos de los trabajadores, de manera especial, el derecho a un salario justo.
(2) Que se garantice la protección social de los trabajadores, por parte de los organismos del Estado y que exista un diálogo social tutelado por el Estado de derecho.
(3) Que se apoye a los agricultores de explotaciones familiares en el Sur, permitiéndoles disponer de su tierra, su agua y sus semillas y facilitando su acceso a los mercados locales.
(4) Que sean capacitadas y promocionadas las mujeres y las niñas en el Sur para que la pobreza y el hambre dejen de tener rostro de mujer.
(5) Que se multipliquen los esfuerzos por potenciar el derecho a la educación y la salud de las comunidades más empobrecidas, sobre todo en el mundo rural.
Artículo publicado en 'Nueva Alcarria' el 10 de febrero de 2023