El domingo 9 de enero es la fiesta del Bautismo del Señor, celebración con que termina el tiempo litúrgico de Navidad y Epifanía. En la celebración el Bautismo de Jesús en las aguas del río Jordán, donde Juan el Bautista anunciaba al Mesías y bautizaba, las comunidades católicas rememoran el comienzo de la misión y predicación de Jesucristo.

Por ello, a partir del lunes 10 de enero el calendario litúrgico inicia la primera parte del tiempo ordinario, la que lleva hasta el comienzo de la Cuaresma en el miércoles de ceniza, el próximo 2 de marzo. En las lecturas dominicales del tiempo litúrgico ordinario, también llamado “per annum” (durante el año), van rememorándose los principales acontecimientos de la vida y ministerio de Jesucristo, este año con los relatos del Evangelio según san Lucas.

Fechas atrás, el obispo diocesano procedió a confirmar por cuatro años a Alicia Casado Pérez como presidenta diocesana de la Adoración Nocturna Femenina (ANFE). Asimismo, confirmó la elección del equipo directivo de la Asociación Diocesana de Scouts de Sigüenza-Guadalajara MSC, con Mercedes Carrasco Gaya como presidenta. Continúa como consiliario el sacerdote Ángel Díaz Matarranz.

El lunes 10 de enero comienzan dos nuevos cursos en la Escuela Diocesana de Teología, en Guadalajara. El nivel de formación institucional ofrece su habitual curso sobre Historia de la Iglesia, que va a impartir el profesor Jesús de las Heras. Y en la sección de los monográficos será el biblista José Luis Albares quien ofrezca ofrecerá un primer curso sobre ‘El mundo de la Biblia’. En ambos casos la duración de los cursos será de cinco sesiones, los lunes de 20:00 a 21:30 horas.

La semana pasada han fallecido, en la casa de las hermanas mayores de Guadalajara, dos hermanas adoratrices. Primero, la hermana Nieves Sánchez, natural de Luanco (Asturias), a los 90 años de edad. Había ingresado en la congregación en 1949 y sirvió a la Iglesia en casas de Santander, Zaragoza y Guadalajara. Luego, la hermana Jesusa Vázquez, natural de Tousa (Orense), que nació en 1925. Ingresó en la congragación en 1955 y sirvió a la Iglesia, la mayor parte de su vida, en las misiones de Chile. A su vuelta fue destinada a Guadalajara.