Desde el jueves 20 de enero, en el marco de una nueva jornada en toda la diócesis de oración por el sínodo, retornan los trabajos de los grupos sinodales

 

Por Jesús de las Heras Muela

(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)

 

 

 

 

 

 

 

 

Nuestra diócesis de Sigüenza-Guadalajara, retoma, desde finales de enero, en grupos, comunidades y parroquias, los trabajos de su sínodo diocesano, bajo el lema “El Sínodo diocesano nos impulsa a evangelizar”. Al efecto, se ha editado y distribuido del primer cuaderno de trabajo. A él, antecedió el llamado cuaderno cero, en el que se plantearon tres grandes cuestiones: “¿Qué es una diócesis?”, “¿Qué es un sínodo?” y “¿Qué es evangelizar?”  Este cuaderno cero se presentó y entregó el 25 de enero de 2020. Pero llegó la pandemia.

Y antes de la pandemia y durante ella y hasta llegar a este nuevo momento de reactivación del sínodo diocesano, este es el camino sinodal recorrido y el camino por recorrer.

 

 

El Sínodo diocesano en 2018 y en 2019

El jueves 17 de mayo de 2018 el obispo de Sigüenza-Guadalajara, Atilano Rodríguez Martínez, anunció al consejo presbiteral su voluntad de convocar un sínodo diocesano. Posteriormente, fue reiterando en otros organismos y foros diocesanos esta decisión y procedió a dar los primeros pasos. Así, tuvo lugar la creación de la Secretaría General del Sínodo (con el sacerdote Ángel Luis Toledano Ibarra, párroco de San Diego de Guadalajara, al frente) y seis comisiones sectoriales de trabajo (Teológica, Canónica, Litúrgica, Pastoral y de Comunicación y Publicaciones). El sínodo diocesano fue abierto, con una solemne y muy concurrida eucaristía en la catedral (más de un millar de personas) el 2 de diciembre de 2018.  Asimismo, el obispo creó el consejo de dirección con sínodo, con una comisión permanente. Con anterioridad y con fecha 8 de septiembre de 2018, don Atilano escribió la carta pastoral titulada “¿Para qué un Sínodo?”.

En 2019, se fueron elaborando el reglamento sinodal, la misión del consejo sinodal, los materiales divulgativos, didácticos y pastorales, el lema –“Vívelo”-, la oración oficial, y una gran encuesta previa, con 169 preguntas y que fue respondida por 5.515 personas. Se hizo un elenco y clasificación de los temas que, según los encuestados, más apremiaban a la misión evangelizadora en el aquí y ahora de nuestra diócesis. Y se dejó todo preparado para una nueva, ya citada, gran cita: 25 de enero de 2020 con la presentación oficial de los grupos sinodales (186 grupos, 2.176 personas inscritas) y la entrega del cuaderno cero para el trabajo sinodal en grupos.

 

En 2020 y 2021, sínodo en pandemia

En enero y febrero de 2020, junto al referido gran acto del 25 de enero, se eligieron cuatro grandes de temas para trabajar en grupos y seguir caminando sinodalmente y se designaron los ponentes; se redactó, ya en plena pandemia, el cuaderno 1 (el que ahora, revisado, acaba de editarse y distribuirse); se elaboró un calendario concreto para este itinerario sinodal; se marcaron plazos y fechas; crecía el interés, la sensibilización y hasta el entusiasmo…

Pero llegó el 15 de marzo de 2020 y el Sínodo comenzó una etapa nueva e imprevista, pero, a buen seguro, no por ello menos fecunda, aunque haya sido y siga siendo etapa de “catacumbas” –por denominarla de alguna manera- o de alargada espera pentecostal, muchas veces, hasta doliente. Y en medio de todo ello, desde la voluntad de que la llama del Sínodo no se apagará se trabajó en el himno sinodal oficial y en otras canciones y en nuevos y sencillos nuevos materiales de reflexión: Y hasta se hizo que esta llama luciera en una mascarilla…, en una edición de 1.325 mascarillas de color negro con el logo, leyenda y lema del Sínodo.

Doce fichas sinodales distintas durante el primer semestre de 2021, una vigilia extraordinaria de oración el 22 de abril, la publicación de un disco con ocho canciones más el himno sinodal diocesano oficial, cuyo autor es Lorenzo Sánchez, una columna mensual en  “EL ECO”, escrita por el secretario del Sínodo diocesano, Ángel Luis Toledano, un encuentro telemático diocesano el 19 de junio, varias cartas del obispo sobre el tema, distintas reuniones del consejo de dirección del sínodo y otras actividades varias fueron algunas de las maneras mediante las cuales el Sínodo diocesano siguió vivo, activo y presente entre nosotros en 2021.

 

 

Y entretanto, el Sínodo universal

Además, nuestra diócesis se sumó, en otoño de 2021, como no podía ser de otro modo, a la convocatoria del Papa Francisco de llamar a todas las diócesis de la Iglesia a ponerse en camino y trabajar en fases diocesanas ante el próximo Sínodo de los Obispos de octubre de 2023, sobre el tema “Por una Iglesia sinodal. Comunión, participación, misión”.

La catedral seguntina acogió el 17 de octubre la misa de apertura de esta fase en nuestra diócesis del sínodo universal. Presidió don Atilano, quien, en la víspera, el sábado 16 de octubre, impartió un retiro sobre la sinodalidad en la concatedral de Guadalajara. Este mismo retiro lo predicó también nuestro obispo a todos los sacerdotes reunidos por arciprestazgos, así como en otros foros.

Desde entonces, 16 y 17 de octubre, y hasta el 30 de noviembre, las dos fichas de consulta propuestas desde la Secretaría General del Sínodo de los Obispos fueron trabajadas en las parroquias, comunidades y grupos sinodales de la diócesis. Y el resultado de este trabajo se ha presentado este pasado miércoles, día 2 de febrero fiesta litúrgica de la Presentación del Señor y Jornada de la Vida Consagrada.

Concluido el tiempo de la consulta, se han recibido 80 respuestas grupales llegadas de toda la geografía diocesana. Y como queda dicho, el miércoles 2 de febrero, en la concatedral de Guadalajara, a las 19 horas, se entregó al obispo diocesano el resultado de la consulta solicitada por el Sínodo universal y el obispo la hace llegar a la Conferencia Episcopal Española (CEE) para sumarse a las que lleguen en las próximas semanas y hasta el 11 de junio del resto de las diócesis españolas. A su vez, la CEE presentará este trabajo conjunto de la Iglesia en España a la Secretaría General del Sínodo de los Obispos.

 

20 temas distribuidos en cuatro bloques temáticos

A la luz, como ya se dijo, de las respuestas a la gran encuesta sinodal del verano de 2019, el consejo de dirección del sínodo, presidido por el obispo, concretó en los 20 temas más solicitados los asuntos a abordar por el sínodo, primero en los grupos sinodales, y más adelante, con las aportaciones de los grupos y las correspondientes mesas de ponencia, en la asamblea sinodal.

Los 20 temas se agruparon y distribuyeron en cuatro grandes bloques temáticos. El primero lleva por título “Llamados” y tiene como referencia bíblica la frase san Pablo en su segunda carta a Timoteo, capítulo 1, versículo 16, “Reaviva el don que hay en ti”. El subtítulo de este primer bloque es “Mirada hacia dentro”. 

Y los cinco temas, ahora presentados en el cuaderno de trabajo número 1, el que acaba de publicarse y entregarse a las parroquias, comunidades y grupos, son los siguientes: la vocación, los fundamentos de la fe, la espiritualidad cristiana, la coherencia fe-vida y la comunión eclesial. Durante lo que queda de curso pastoral (hasta junio) se ha de trabajar en estos temas desde los materiales del cuaderno primero.

En próximas entregas, NUEVA ALCARRIA irá presentando el desarrollo y contenidos de estos cinco temas del cuaderno sinodal primero

El segundo bloque temático, titulado “Desafiados”, incluye otras cinco temáticas pastorales: jóvenes, mujer, alejados, nuevas formas de unión y otros colectivos y ecología. “Jesús, mirándolo lo amo”, frase del evangelio de san Marcos, capítulo 10, versículo 21, es su lema o inspiración bíblica. La frase corresponde al diálogo entre Jesús y el joven rico. “Algunos desafíos” es el subtítulo del bloque segundo.

“Evangelizamos. Retos evangelizadores” es el enunciado del tercer bloque, cuya referencia o lema bíblico es “Sois la luz y la sal del mundo” (cfr. Mateo, 5, 13a.14ª). Sus cinco temas concretos son estos: familia, laicos, mundo rural, formación cristiana y celebración de la fe.

Por fin, el cuarto bloque de temas reza “Servimos. Acción social y vida pública”. Su referente bíblico es la frase del evangelio de san Juan “Para que tengan vida…” (Jn 10,10). Y su temario incluye estas cinco cuestiones pastorales: pobreza, pastoral de la caridad, solidaridad, vida pública y comunicación”.

        

Oraciones oficiales para el Sínodo diocesano

Esta es la oración propia y oficial de nuestro sínodo diocesano: “¡Bendito seas, Dios y Padre nuestro! Escucha la oración de la Iglesia de Sigüenza-Guadalajara que vive un Sínodo para la renovación de su misión evangelizadora.

Haz que, guiados por tu Hijo y alentados por el Espíritu Santo, tomemos las decisiones oportunas, para mostrar tu amor a todos los hombres.

Santa María, Madre de la Iglesia, intercede por nosotros para que, iluminados por la Palabra de Dios, vivamos unidos y firmes en la fe. Amén”.

Asimismo, nuestro sínodo ha incluido como oración oficial la plegaria común del sínodo universal. Se trata de la siguiente oración al Espíritu Santo, atribuida a san Isidoro de Sevilla (560-636) y que fue con la que se comenzó cada una de las sesiones de trabajo del Concilio Vaticano II. La oración dice así:

“Estamos ante ti, Espíritu Santo, reunidos en tu nombre. Tú, que eres nuestro verdadero consejero: ven a nosotros, apóyanos, entra en nuestros corazones. Ensénanos el camino, muéstranos cómo alcanzar la meta. Impide que perdamos el rumbo como personas débiles y pecadoras. No permitas que la ignorancia nos lleve por falsos caminos. Concédenos el don del discernimiento, para que no dejemos que nuestras acciones se guíen por prejuicios y falsas consideraciones. Condúcenos a la unidad en ti, para que no nos desviemos del camino de la verdad y la justicia, sino que en nuestro peregrinaje terrenal nos esforcemos por alcanzar la vida eterna. Esto te lo pedimos a ti, que obras en todo tiempo y lugar, en comunión con el Padre y el Hijo por los siglos de los siglos. Amén”.

 

Lo que es un sínodo y las fases de nuestro sínodo

En su ya citada carta pastoral de septiembre de 2018, nuestro obispo definía con estas palabras lo que es un sínodo diocesano: “el sínodo diocesano, que es el culmen de las estructuras de participación de los miembros de una diócesis, tiene que ser, ante todo, un acontecimiento de gracia. Por medio del sínodo, el Pueblo de Dios que vive y actúa en una diócesis es convocado y congregado por el mismo Señor, bajo la guía del obispo diocesano, para plantear los principales desafíos pastorales, para buscar juntos los caminos a recorrer en la misión y para cooperar activamente en la toma de las necesarias decisiones, desde una actitud de sincera escucha del Espíritu Santo”

Cuatro fases más una fase previa o fase cero (anuncio, convocatoria, preparación documental, nombramientos, reglamentos, ambientación y sensibilización) son las previstas en el itinerario de nuestro diocesano. La fase uno fue la de la encuesta sinodal y su tabulación, discernimiento y selección y distribución de los temas propuestos en ella. Fue la fase de la consulta y de la escucha. Actualmente, estamos en la fase dos, la de los trabajos en grupos sinodales y las posteriores ponencias a la luz de sus propuestas y resultados). Es la fase del diálogo, la reflexión y la oración.

Completada la fase segunda y desde ella, mediante las ponencias, llegará la tercera: la de la asamblea sinodal, con las sesiones y modalidades que correspondan y sus conclusiones y documento final y misa solemne de clausura del proceso sinodal. Finalmente, la fase cuarta será la de la aplicación y la de la conversión pastoral en aras a ser Iglesia en salida misionera.

 

 

PUBLICADO EN NUEVA ALCARRIA 4 FEBRERO 2022

Por Ángel Moreno

(de Buenafuente)

 

 

 

 

¿Cómo transmitir luz en la mirada, 

si el reflejo está oscuro?

¿Cómo ser testigo del azul del cielo,

si la nube cubre el firmamento?

 

Mas, los ojos intuyen transparencias.

Al sol no le pueden los fantasmas,

ni el drama, a la vida honesta,

aunque esté velado el horizonte

 

Abrirse a luz en día claro

es provecho menesteroso en el invierno.

Mantener la luz siempre encendida 

es regalo interior, más allá de los brazos.

 

No te ofendas, si te afirmo que es posible

el amor en el combate y en la contienda,

la luz en la noche, aunque no haya estrellas,

y el abrazo en la guerra. 

 

Son mundos distintos, diferentes. 

De noche lucen las centellas,

en medio de la prueba, la belleza,

escondida en la ofrenda secreta. 

 

Aunque no lo veas, aunque no lo sientas,

es verdad la luz, más allá de la niebla.

El que lo hizo todo, se hizo nube de día,

Y columna de fuego en las tinieblas.

 

En medio de la pandemia, la diócesis vivió con mayor normalidad que en 2020, contando con la figura de su obispo como uno de los protagonistas del año

 

Por Jesús de las Heras Muela

(Periodista y sacerdote. Deán de la catedral de Sigüenza)

 

 

 

 

 

 

 

 

La pandemia marcó también en la vida de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara, como no podía ser de otro modo, el año 2021. Pero la diócesis no se paró y siguió trabajando en sus distintas ámbitos y sectores pastorales (Infancia y Catequesis, Juventud y Adolescencia, Pastoral Obrera, Apostolado Seglar, Familia y Vida, Migraciones, Acción Católica General) y un largo etcétera, cuyo elenco o relación de actividades concretas exceden los límites de espacio de esta crónica.  Baste un apunte sobre, al compás de la Iglesia universal, las distintas iniciativas desarrolladas también en Sigüenza-Guadalajara en torno al Año de San José y Año de la Familia «Amoris laetitia», con ocasión respectiva del 150 aniversario de la proclamación de san José como patrono universal de la Iglesia y del quinto aniversario de la publicación sobre el matrimonio y la familia del Papa Francisco, titulada precisamente «Amoris laetitia» (La alegría del amor),

Sí, hemos de mencionar a Cáritas y como botón de muestra de su extraordinario servicio, una fecha, un lugar un acontecimiento: el 30 de septiembre fue la inauguración del nuevo, moderno, espléndido y con mayores recursos y prestación más amplia de ayudas y recursos del Centro Betania de Guadalajara, casa de acogida al servicio de personas sin hogar. Por otro lado, al volcán de Cumbre Vieja en la isla canaria de La Palma, a través de Cáritas, nuestra diócesis envió unos 15.000 euros. Por cierto, María José Busto Garrido es, desde junio, la nueva directora de Cáritas Diocesana.

 

2021: año de años de don Atilano

 Si siempre en toda diócesis la persona y ministerio de su obispo es capital, 2021 ha sido muy singularmente el año de don Atilano Rodríguez Martínez, obispo de Sigüenza-Guadalajara desde el 2 de abril de 2011.

Sus diez años entre nosotros vinieron acompañados de otros tres números redondos. Así, aunque propiamente los 50 años de sacerdote los cumplió en 2020, dado que entonces no fue posible, a causa de la pandemia, y como en 2021, concretamente el 18 de febrero, cumplía 25 años de obispo, la diócesis organizó un acto de reconocimiento, de felicitación y de acción de gracias por ambas efemérides en la fecha que más oportuna pareció en medio de los altibajos de la pandemia. Fue el sábado 25 de septiembre en la catedral de Sigüenza.

Justo un mes más tarde, don Atilano cumplió los 75 años, la edad en la cual los obispos han de presentar su renuncia al gobierno pastoral de una diócesis, renuncia que no es, en ningún caso efectiva, hasta que el Papa decide y provee con el nombramiento de un nuevo obispo.

Por lo demás, en este su año especial, don Atilano ha desarrollado una actividad prácticamente normal, habida cuenta, eso sí, de las variables de la pandemia y las distintas modalidades ya citadas de presencia.  Así, una vez más, visitó todos los arciprestazgos diocesanos y numerosas comunidades de vida consagrada. Por poner un ejemplo, administró el sacramento de la confirmación en numerosas parroquias y presidió otras eucaristías especiales por motivos varios en otros muchos lugares.

Y al santuario de Nuestra Señora de la Salud de Barbatona acudió en dos ocasiones: el domingo 9 de mayo para la que habría de haber sido la Marcha Diocesana y que la pandemia impidió, pero que sí contó con misa y, además, de nuevo, televisada por 13TV y por otras plataformas mediáticas y digitales, con una audiencia muy notable; y el domingo 12 de septiembre, para la fiesta tradicional de la Virgen de la Salud.  Además, Barbatona experimentó en el primer cuatrimestre de 2021 dos importantes actuaciones: una marquesina de protección y dignificación del ámbito celebrativo de las Marchas del segundo domingo de mayo, y la tercera fase de las obras de rehabilitación, consolidación y ornamentación del santuario.

Don Atilano también mantuvo una repleta agenda de reuniones y de visitas, tanto en lo relativo a su condición de obispo diocesano como al servicio en la CEE de la presidencia de la Comisión Episcopal de Pastoral Social y Promoción humana.

Por otro lado, y ya en las postrimerías del año, con fecha 28 de noviembre, primer domingo de Adviento, don Atilano publicó una nueva carta pastoral (ha escrito una cada año de su ministerio episcopal entre nosotros). «Formación cristiana y evangelización» es su título.

        

Sínodo diocesano y sínodo universal

Doce fichas sinodales distintas durante el primer semestre de 2021, una vigilia extraordinaria de oración el 22 de abril, la publicación de un disco con ocho canciones más el himno sinodal diocesano oficial, cuyo autor es Lorenzo Sánchez, una columna mensual en «EL ECO», escrita por el secretario del Sínodo diocesano, Ángel Luis Toledano, un encuentro telemático diocesano el 19 de junio, varias cartas del obispo sobre el tema, distintas reuniones del consejo de dirección del sínodo y otras actividades varias fueron algunas de las maneras mediante las cuales el Sínodo diocesano siguió vivo, activo y presente entre nosotros en 2021.

Además, nuestra diócesis se sumó, como no podía ser de otro modo, a la convocatoria del Papa Francisco de llamar a todas las diócesis de la Iglesia a ponerse en camino y trabajar en fases diocesanas ante el próximo Sínodo de los Obispos de octubre de 2023. La catedral seguntina acogió el 17 de octubre la misa de apertura de esta fase en nuestra diócesis del sínodo universal. Desde entonces y hasta el 30 de noviembre, las dos fichas de consulta propuestas desde la Secretaría General del Sínodo de los Obispos fueron trabajadas en las parroquias, comunidades y grupos sinodales de la diócesis. Y el resultado de este trabajo se presentará el próximo 2 de febrero.

 

Sacerdotes y consagrados

Dos sacerdotes diocesanos fallecieron en 2021: Antonio de Gregorio Ruiz y José Torralba Torralba.  Hay que mencionar también las muertes de otros sacerdotes nacidos en la diócesis, aunque estaban incardinados en Madrid: José Luis Martínez Martínez y Pedro Martínez Cid.

De los numerosos nombramientos sacerdotales en 2021, mencionamos tres de ámbito más diocesano: Emilio Ruiz Malo, nuevo delegado diocesano de Misiones; Pedro Simón Carrascoso, nuevo canónigo archivero de la catedral; y Alfonso María Duch Cartañá, director diocesano de la Red Mundial de Oración por el Papa (Apostolado de la Oración).

El 4 de julio, en la concatedral de Guadalajara, el seminarista diocesano Enrique López Ruiz fue ordenado diácono y podría recibir el presbiterado en 2022.

Por otro lado, en relación a la vida consagrada, sor Susana Nieves Moreno, hermana de la Caridad de Santa Ana en Guadalajara, es la nueva presidenta de la CONFER Diocesana.

El fallecimiento en el invierno pasado de dos monjas cistercienses de Brihuega redujo la comunidad a cuatro hermanas, con la cual la comunidad no podía permanecer, según la legislación eclesiástica, y el Císter de Brihuega, tras cuatro siglos, desapareció y las cuatro monjas marcharon, el 26 de julio, a un monasterio de la orden en Madrid.

Murieron también otras tres monjas contemplativas diocesanas: una clarisa de Sigüenza, una cisterciense de Buenafuente del Sistal y la abadesa del monasterio benedictino de Valfermoso de las Monjas (la carismática madre Josefina) A día de hoy, hay nueve monasterios contemplativos en la diócesis y 77 monjas.

Fallecieron asimismo cinco hermanas adoratrices de Guadalajara; un hermano de la Sagrada Familia de Sigüenza; una hermanita de los Ancianos Desamparados de Guadalajara; y otra carmelita del Sagrado Corazón de Humanes.

 

 

Nuestra diócesis y la cultura

Aunque concluida su construcción a finales del siglo XVII, no fue hasta 1871 cuando el templo parroquial de San Juan Bautista de Jadraque fue litúrgicamente consagrado y dedicado. Estos 150 años han sido reclamo de tan distintas actividades como una exposición regional itinerante de fotografía al comienzo del verano («Un patrimonio de todos», que también estuvo en otoño en Pastrana); una exposición artística en el templo titulada «Los Zurbaranes de Jadraque» (se clausura el 30 de enero), un ciclo cultural de conferencias, música y participación ciudadana, la elaboración de una magnífica maqueta del templo y distintos actos religiosos y sociocaritativos.

«Tiempo de Pasión» de Jesús Orea, Algora. «Notas históricas sobre su iglesia parroquial» de Juan Antonio Marco, «Orar y celebrar la Semana Santa» y «Salmos para tiempos recios. Oraciones desde las entrañas» de Ángel Moreno fueron publicaciones en 2021 relacionadas con la diócesis.

En relación con las actuaciones en el patrimonio cultural diocesano, 2021 ha sido un año muy fecundo y brillante, con la renovación y ampliación de convenios con otras instituciones y numerosas obras e iniciativas llevadas a cabo en nuestros templos. Son tantos los ejemplos que podrían acompañar estas líneas que citaremos tan solo dos de ellos: la creación del Museo Mendocino de Mondéjar; y las obras, ya finalizadas y bendecidas, de rehabilitación y decoración del templo parroquial de San Francisco Javier de Azuqueca de Henares. Felicidades a quien hicieron y hacen posible este magnífico trabajo al patrimonio cultural diocesano y, en definitiva, a la misión evangelizadora.

Molina de Aragón, en su iglesia de San Pedro, albergó la exposición «Consolados en la esperanza», desde la primavera hasta el verano, y en diciembre volvió a albergar un precioso y monumental Belén, titulado «El Belén de Molina, el molino de Belén». Y otro Belén magnífico, espectacular y extraordinario –precisamente su título ha sido «Un Belén extraordinario»- fue el del Colegio Diocesano Cardenal Cisneros de Guadalajara, situado en su anexa y amplia capilla del seminario diocesano de San José.

Y desde finales de año, la iglesia parroquial de Humanes acoge un precioso óleo sobre la Piedad, donado por el prestigioso pintor donostiarra, vinculado con esta villa campiñera, Ricardo Sanz.

En relación con la catedral de Sigüenza, el buque insignia también en lo relativo al arte y a la cultura de nuestra tierra, hubo de estar cerrada, a causa de la pandemia, entre el 1 de octubre de 2020 al 1 de mayo de 2021. Con todo, la catedral ha estrenado una nueva sala para la visita cultural (la sala de las banderas históricas, además con un espléndido óleo del martirio de san Sebastián) y ha sido objeto de una espléndida rehabilitación integral del interior, exterior, talla y altar del Cristo de la Misericordia. Además, se trabaja en varios proyectos de futuro inmediato.

 

 

La ambivalente demografía diocesana

Sigüenza-Guadalajara vuelve a crecer en población y cuenta ya con 265.508 habitantes (nuevo récord histórico), según los más reciente datos del Instituto Nacional de Estadística), con edad media de 40 a 44 años y un 17% de población extranjera frente al 11% de media en España.

Sin embargo, la distribución de la población es muy alarmante. Así, habida cuenta la extensión de la diócesis, 12.200 kilómetros cuadrados, la desproporción en el reparto de la población es elevadísimo: en el 94% de nuestra superficie territorial solo vive el 20% de la población y el 93% de los municipios se halla en situación de extrema despoblación. 

Lo anterior significa también el 80% de la población se concentra en el 6% de la superficie provincial y diocesana (los límites territoriales de la diócesis y de la provincia son los mismos), que es la zona que comprende los municipios entre Azuqueca de Henares y Torija, con la ciudad de Guadalajara como epicentro. Y a partir, de Torija, la España vaciada pura y dura…

 

 

PUBLICADO EN NUEVA ALCARRIA 28 ENERO 2022

Por Ángel Moreno

(de Buenafuente)

 

 

 

Hoy celebramos en Buenafuente la solemnidad de los santos fundadores del Císter. Ellos fueron pioneros de la reforma benedictina, con el deseo de una vida monástica más sencilla, fraterna, humilde.

 

El Císter nos ofrece una espiritualidad afectiva, en la que impera el amor a Dios, desde la Carta de Caridad.

 

Los santos cistercienses nos adentran a la relación con Dios que es amor, amistad, relación, compañía, huésped y anfitrión, tres veces santo, un Dios que es siempre más.

 

En esta fiesta deseamos ofrecer la nueva página WEB, donde se puede encontrar información de la identidad del lugar del Sistal, actividades programadas, apoyo litúrgico.

La dirección de la página es: https://buenafuente.org/

 

Espero que os guste. Su creación ha sido una ofrenda muy generosa de algunos amigos informáticos.

 

Información

Obispado en Guadalajara
C/ Mártires Carmelitas, 2
19001 Guadalajara
Teléf. 949231370
Móvil. 620081816
Fax. 949235268

Obispado en Sigüenza
C/Villaviciosa, 7
19250 Sigüenza
Teléf. y Fax: 949391911

Oficina de Información
Alfonso Olmos Embid
Director
Obispado
C/ Mártires Carmelitas, 2
19001 Guadalajara
Tfno. 949 23 13 70
Fax: 949 23 52 68
info@siguenza-guadalajara.org

 

BIZUM: 07010

CANAL DE COMUNICACIÓN

Mapa de situación


Mapa de sede en Guadalajara


Mapa de sede en Sigüenza

Si pincha en los mapas, podrá encontrarnos con Google Maps